lunes, 13 de septiembre de 2010
Tengo hermanos en el mundo,
sufrientes hermanos,
solos,
cautivos de un dolor
que contagia, siniestro.
En el mundo nadie es mudo
y tienen mis hermanos
rojos corazones
grandes como melones, ansiosos de amor,
frutillas dormidas en jardines abiertos.
Tu pelo cae como la lluvia.
Alguien te enseñó a morir, a olvidar,
a mirarte la espalda.
¿A quién pedirle, cuando menos, una ayuda
cuando sólo resta sufrir, odiar,
perder la calma?
.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
LICENCIA
Creative Commons License
This obra by Pablo F. Vázquez is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-Sin obras derivadas 2.5 Argentina License.
Escritos
- mayo 2009 (10)
- julio 2009 (3)
- agosto 2009 (5)
- septiembre 2009 (4)
- octubre 2009 (9)
- noviembre 2009 (2)
- diciembre 2009 (5)
- febrero 2010 (7)
- abril 2010 (1)
- junio 2010 (2)
- julio 2010 (2)
- agosto 2010 (1)
- septiembre 2010 (3)
- octubre 2010 (1)
No hay comentarios:
Publicar un comentario